Receta de Atole de Grano

Este atole, típico del centro de México, pero que descubrimos específicamente en Michoacán, es el desayuno dominguero imperdible por nutritivo, antes de ir a las gorditas, las flautas y otros antojitos.

Su ingrediente base, el maíz, es clave no sólo en la nutrición mexicana, sino también en su gastronomía. Llega a nosotros esta presentación de atole que a primera vista es salado, después, se acompaña con salsas y limón, para después toparnos con su sabor agridulce.

Prueba un día esta nueva forma de desayunar y acompáñanos a descubrir la receta.

Ingredientes necesarios

Elotes tiernos, te recomiendo 5

3 manojitos de anís

Masa de maíz, necesaria para espesar nuestro atole

4 cucharadas de harina

2 chiles serranos, si te gusta picoso, añade más

Sal al gusto

2½ litros de agua

250 gramos de azúcar

Cómo se prepara

Primero tomaremos nuestro ingrediente básico, los elotes, los pondremos a remojar durante dos horas, para que se ablanden y, después, procederemos a desgranarlos.

Después, procederemos a poner en una olla, agua a hervir, agregaremos sal y, cuando suelte el hervor, añadiremos los elotes con cuidado para evitar accidentes, como pequeñas quemaduras por las gotas de agua caliente.

Vamos a cocinar a fuego medio hasta que los granos de elotes estén en su punto, esto quiere decir, blanditos. Mientras está lo anterior en el fuego, tomaremos unos mililitros del agua de nuestros elotes que, ya mezclada con los demás ingredientes, será licuado con el anís para amalgamar los sabores.

Procedemos a añadir la mezcla, después de licuarla, a la olla, para dejar, por unos minutos más, dejar cocinar a fuego lento con el fin de que los sabores se asienten. Cuando creas pertinente, agrega la harina en media taza de agua fría, paso indispensable para cualquier tipo de atole.

Puedes, en ese inter, licuar los chiles serranos, colar y agregarlos a la mezcla. Después, hervimos otro rato, todo junto, hasta lograr la consistencia del atole. Hago un paréntesis aquí porque depende mucho de cómo le gusta a cada familia, así que el punto exacto puede variar.

Este atole típico del centro de México, ideal como un desayuno rico en poderosos nutrientes, al ser salado, es indispensable consumirlo con salsa y limón.